lunes, 15 de marzo de 2010

Definición del Núcleo desde la Interdisciplinariedad

En la Normal se ha estructurado el currículo integrado a partir de los núcleos interdisciplinares.
Como punto de inicio están delineados los ejes transversales como organizadores generales del currículo.

La estructura del núcleo está propuesta como forma de organizar el conocimiento que articula contenidos disciplinares como base en elementos comunes y vinculantes, tales como principios, conceptos, categorías de análisis, lenguaje unívoco, problemas de investigación.
Esta integración construye entonces, un saber pedagógico y no meramente un contenido curricular.

Si el objetivo de toda acción educativa es la formación integral, ésta no sería tal, si no se atienden y propician todas las dimensiones del hombre. La pedagogía como disciplina que se ocupa del quehacer educativo siempre ofrece y vela porque exista un sistema de saberes, métodos y procedimientos que tengan o posean coherencia interna y articulaciones con diferentes disciplinas, ciencias o áreas del conocimiento que favorecen en gran medida la dimensión artística, estética del hombre.

Por ello, busca educar, no a través del propio ejemplo, felicitando el desempeño al estudiante para autodeterminarse, para la creatividad y el entusiasmo y acompañarlo en su acción y proyección. Visto lo pedagógico, el objeto de éste núcleo no puede ser otro que el de educar en la acción, donde se conjugue la teoría y la práctica mediante actividades lúdicas que permitan un desarrollo adecuado en la motricidad de los estudiantes, y por lo tanto en todas las dimensiones. Por tal motivo los dos elementos educador – educando se deben complementar en las acciones conjuntas para la transformación personal e integral, incluyendo el contexto escolar o la relación directa con el ambiente las áreas en la cual se realizan dichas acciones.

La Educación Física, Artística, la recreación, los deportes, las actividades lúdicas y artísticas ofrecen múltiples oportunidades para aprender a compartir, proceder de acuerdo con normas, valorar el hecho de participar, disfrutar los triunfos y aprender las acciones que encierran las derrotas, pero ante todo para descubrir las bondades y la exigencia del trabajo en equipo que conduce a crecer juntos y a lograr metas comunes.

El conocimiento mismo del cuerpo, de nuestras capacidades y habilidades, de las acciones que estamos dispuestos a desarrollar de forma armoniosa y dinámica fomenta la autoestima, impulsan las actividades, a la exploración, a la curiosidad y el desarrollo de todas las dimensiones esenciales para la formación del hombre.

De igual forma para todo lo planteado anterior y particularmente del pensamiento es fundamental y necesario las experiencias que, al igual que su interrelación son asimiladas por las estructuras mentales para continuar el proceso de conocimiento y desarrollo íntegro. Este proceso implica tiempo para conocer, asimilar, experimentar y construir en un movimiento dinámico y complejo que busca un equilibrio psicológico, emocional y conceptual.

Todo ello facilita un continuo desarrollo de los pilares de la educación, puesto que el compartir experiencias coloca al servicio de los demás sus capacidades y habilidades de diversas formas, los estudiantes aprenden a conocer a ser, a vivir juntos y a hacer como dice y afirma Jacques Delors “La educación encierra un tesoro”.